Soy una persona alegre y con mucho sentido del humor: creo que reírse, incluso de una misma, hace la vida más ligera y nos ayuda a conectar de una manera más auténtica. 

La música es mi compañera constante: siempre tengo una canción sonando y me encanta descubrir nuevos temas, desde lo más clásico hasta lo más actual.

Viajar es otra de mis pasiones: me gusta conocer lugares, culturas y personas diferentes, y creo que cada experiencia fuera de casa te cambia un poquito por dentro. También tengo un espíritu muy navideño; esa época del año me encanta porque me conecta con la ilusión y con mi gente.

Para desconectar me gusta disfrutar de las cosas sencillas: una charla con amigos, un café con calma, un buen libro… Quienes me conocen dicen que transmito cercanía y confianza, y que conmigo es fácil sentirse en un ambiente relajado.

Elegí estudiar sexología porque siempre me ha fascinado entender cómo vivimos nuestras relaciones, los vínculos y la sexualidad. Creo que hablar de estos temas con naturalidad es fundamental, y me motiva poder aportar una mirada libre de tabúes y juicios, que permita a cada persona vivir su intimidad de una forma más plena y sana.